Yo siempre me consideré una mujer moderna e independiente. Me gustaba la musica avant-guard, vivía metida en museos y exposiciones modernas o festivales internacionales de teatro, frecuentaba dicotecas de transvestis, etc. Estaba convencida desde muy joven que nunca iba a casarme, nunca iba a ser la ama de casa, la Sra. de…. nadie y mucho menos iba a tener hijos. Mi plan era viajar por el mundo, conocer nuevas culturas y ser « diferente ».
Bueno la vida pasa, los planes cambian y la alegría la encuentras en los sitions menos esperados. Yo la encontré en Washington, DC, donde conocí al hombre que por fin me pudo domar y donde a tropezones nos conseguimos frente a un aparato que sirvio de ventana a un sin fin de alegrías que jamás nos pudimos imaginar…un sonograma ! Y en él vimos por primera vez a Alex !
De eso ya hace muchos años….casi 9 para ser precisos y ya lo que queda de esa mujer moderna e independiente es menos que un recuerdo. Tengo un esposo y dos hijos preciosos a los que amo mas que a nada y una vida que, de joven, siempre me prometí que jamás tendría, pero que no cambiaría por nada en el mundo.
Ya establecidos y convencidos de nuestro rumbo decidimos que estabamos completos. Somos cuatro y no más ! Desde el dia en que llegó Nicole y el Dr. nos preguntó, tijera en mano, Están seguros ? y le dijimos que si, supe que nunca mas iba a sentir esa emoción, ese nerviosismo, esa alegría de ver esa formita en la pantalla. Pero sabia que era la decisión correcta. Lo que nunca supe es que casi esa misma sensación se podia tener viviendola a través de nuestros seres queridos. Con razón las suegras se vuelven tan locas con las noticias de saber que van a tener un nieto(a).
Bueno mis hijos solo tienen 8 y 3, pero he podido experimentar esa alegría un par de veces al saber que mi hermana estaba en estado y al nacer y conocer a mi primera sobrina. Hoy nuevamente la pude experimentar al saber que mi otra hermana (para todos fines menos sanguíneos) Michelle, estaba en estado.
La explosion de emociones de ver esa fotico en blanco y negro producida por semejante aparato como el sonograma es tan inmensa que para aquellos que nunca lo han vivido de cerca es difícil de imaginar. Cucho y yo conocemos bien todo el proceso por el que van a pasar : todo el nerviosismo, toda la dicha, todas las noches desveladas que parecen no tener fin y el conocer ese bien esa travesía creo que es lo que nos llena de tanta alegría.
Hoy en día todavia me creo moderna, manejo un Prius y escucho Radiohead, voy a fiestas en museos y no me pierdo ni un concierto y soy fiel creyente del « pro-choice », pero para mi hoy la alegría se pinta en blanco y negro y aunque aun admiro mucho esas mujeres que quieren ser diferentes y retar al conformismo (y mira que toma mucho valor ser ellas), también les digo que una vez que ves y escuchas ese latido de corazón por dentro nunca volverás a ser igual, ni lo querrás volver a ser jamás.
Besos,
Chris~
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Bueno la vida pasa, los planes cambian y la alegría la encuentras en los sitions menos esperados. Yo la encontré en Washington, DC, donde conocí al hombre que por fin me pudo domar y donde a tropezones nos conseguimos frente a un aparato que sirvio de ventana a un sin fin de alegrías que jamás nos pudimos imaginar…un sonograma ! Y en él vimos por primera vez a Alex !
De eso ya hace muchos años….casi 9 para ser precisos y ya lo que queda de esa mujer moderna e independiente es menos que un recuerdo. Tengo un esposo y dos hijos preciosos a los que amo mas que a nada y una vida que, de joven, siempre me prometí que jamás tendría, pero que no cambiaría por nada en el mundo.
Ya establecidos y convencidos de nuestro rumbo decidimos que estabamos completos. Somos cuatro y no más ! Desde el dia en que llegó Nicole y el Dr. nos preguntó, tijera en mano, Están seguros ? y le dijimos que si, supe que nunca mas iba a sentir esa emoción, ese nerviosismo, esa alegría de ver esa formita en la pantalla. Pero sabia que era la decisión correcta. Lo que nunca supe es que casi esa misma sensación se podia tener viviendola a través de nuestros seres queridos. Con razón las suegras se vuelven tan locas con las noticias de saber que van a tener un nieto(a).
Bueno mis hijos solo tienen 8 y 3, pero he podido experimentar esa alegría un par de veces al saber que mi hermana estaba en estado y al nacer y conocer a mi primera sobrina. Hoy nuevamente la pude experimentar al saber que mi otra hermana (para todos fines menos sanguíneos) Michelle, estaba en estado.
La explosion de emociones de ver esa fotico en blanco y negro producida por semejante aparato como el sonograma es tan inmensa que para aquellos que nunca lo han vivido de cerca es difícil de imaginar. Cucho y yo conocemos bien todo el proceso por el que van a pasar : todo el nerviosismo, toda la dicha, todas las noches desveladas que parecen no tener fin y el conocer ese bien esa travesía creo que es lo que nos llena de tanta alegría.
Hoy en día todavia me creo moderna, manejo un Prius y escucho Radiohead, voy a fiestas en museos y no me pierdo ni un concierto y soy fiel creyente del « pro-choice », pero para mi hoy la alegría se pinta en blanco y negro y aunque aun admiro mucho esas mujeres que quieren ser diferentes y retar al conformismo (y mira que toma mucho valor ser ellas), también les digo que una vez que ves y escuchas ese latido de corazón por dentro nunca volverás a ser igual, ni lo querrás volver a ser jamás.
Besos,
Chris~
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