Fernando Torres y Olalla Domínguez han querido regresar, por unos días, a su vida de solteros. La pareja se ha escapado a Cerdeña para disfrutar de unas vacaciones en pareja, sin la compañía de sus dos hijos, Nora y Leo, antes de que el futbolista vuelva a los entrenamientos con el Chelsea.
Muy cariñosos, Fernando Torres y Olalla Domínguez, que presumió de esbelta figura con un bikini rosa tras haber dado a luz en diciembre, se relajaron tomando el sol en dos cómodas hamacas. Prácticamente solos en la playa, el futbolista y su mujer pudieron tener unas horas para ellos y disfrutar así de su relación de pareja.
Discretos con su vida privada, Fernando, que tardó un par de meses en presentar oficialmente a su segundo hijo, y Olalla forman uno de los matrimonios más estables del panorama futbolístico. Centrados en su papel de padres, la pareja ha querido así sacar algo de tiempo para mimarse el uno al otro, escogiendo, además, un destino que parece ligado al mundo del fútbol. Y es que Andrés Iniesta y su novia, Anna, también han pasado unos días de vacaciones en Cerdeña, curiosamente también sin la presencia de su pequeña, Valeria, que al igual que Leo y Nora, se quedó en casa para dejar a sus padres disfrutar de unos días a solas.
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