Desde que el tristemente celebre exalcalde mayor de Caracas, Juan Barreto, fundara Ávila TV en 2006, como propuesta alternativa a los medios del mainstream audiovisual venezolano, la premisa del canal ha sido la rebeldía.
Con una concepción visual de lo urbano caraqueño bastante interesante y con el propósito de ser espejo de las tribus urbanas de nuestra amada y golpeada Sultana del Ávila; Ávila TV nació como una excelente idea para el disfrute de los caraqueños.
Pero esa excelente idea se quedó en eso y su ejecución ha sido bastante pobre, ya que su sectarismo editorial, pro-bota militar del comandante -¡vaya paradoja rebelde!- le ha quitado toda el aura alternativa que pregona. Para colmo, y como muestra de la poca fibra democrática de quienes la manejan, pasó de la Alcaldía Mayor al Ministerio de Comunicación e Información -herramienta propagandística del gobierno- al asumir el nuevo alcalde mayor, Antonio Ledezma, en 2008.
Yo me pregunto, ¿Los panas que hacen, dirigen, conducen y vacilan en los programas en Ávila realmente se creerán el cuento de que se están comiendo el mundo con su rebeldía cuando sus programas son interrumpidos por algunas de las peroratas interminables y sin sentido del Teniente Coronel? ¿De cuándo acá la juventud rebelde le paga la prote a la bota militar? ¿De verdad se creen el cuento de la inclusión social cuando excluyen al que piensa diferente? Repito, excelente idea, pobre ejecución.
Ciro
Con una concepción visual de lo urbano caraqueño bastante interesante y con el propósito de ser espejo de las tribus urbanas de nuestra amada y golpeada Sultana del Ávila; Ávila TV nació como una excelente idea para el disfrute de los caraqueños.
Pero esa excelente idea se quedó en eso y su ejecución ha sido bastante pobre, ya que su sectarismo editorial, pro-bota militar del comandante -¡vaya paradoja rebelde!- le ha quitado toda el aura alternativa que pregona. Para colmo, y como muestra de la poca fibra democrática de quienes la manejan, pasó de la Alcaldía Mayor al Ministerio de Comunicación e Información -herramienta propagandística del gobierno- al asumir el nuevo alcalde mayor, Antonio Ledezma, en 2008.
Yo me pregunto, ¿Los panas que hacen, dirigen, conducen y vacilan en los programas en Ávila realmente se creerán el cuento de que se están comiendo el mundo con su rebeldía cuando sus programas son interrumpidos por algunas de las peroratas interminables y sin sentido del Teniente Coronel? ¿De cuándo acá la juventud rebelde le paga la prote a la bota militar? ¿De verdad se creen el cuento de la inclusión social cuando excluyen al que piensa diferente? Repito, excelente idea, pobre ejecución.
Ciro
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